Asesoría para organización de brigadas de emergencia

Es un grupo de trabajadores organizados, debidamente entrenados y capacitados para actuar en la prevención, control y reacción ante situaciones de emergencia dentro de la empresa. Su objetivo principal es salvaguardar la vida de las personas, los bienes materiales y el entorno.

Aunque tener voluntarios es importante, la organización requiere técnica. La asesoría asegura que la estructura de la brigada cumpla con los estándares internacionales y normativas locales, definiendo roles jerárquicos claros para evitar el caos durante una crisis real.

Generalmente se dividen en: Jefe de Brigada (quien coordina las acciones), jefes de grupo (por especialidad como primeros auxilios o evacuación) y brigadistas operativos. Nuestra asesoría ayuda a definir funciones específicas como el "primer respondiente" o el "evaluador de zonas".

Se buscan perfiles voluntarios con aptitud física y mental adecuada, permanencia en las instalaciones y liderazgo. Nosotros asesoramos en la selección para garantizar que haya cobertura en todos los turnos y áreas críticas de la empresa.

Depende del análisis de riesgos de su empresa, pero típicamente deben estar preparados para: incendios (control de fuego incipiente), evacuación y rescate, primeros auxilios médicos y, en algunos casos, derrames de materiales peligrosos.

La capacitación debe ser continua. Se recomienda un cronograma anual que mantenga las habilidades frescas. Las sesiones teóricas y prácticas deben realizarse periódicamente para asegurar que los brigadistas no olviden los protocolos de actuación.

Es el documento maestro que entregamos donde se consignan los procedimientos operativos normalizados (PON), el organigrama de la brigada, los planes de acción y las responsabilidades legales de cada miembro.

No. La brigada es un equipo de primera respuesta. Su función es controlar la emergencia en sus etapas iniciales o estabilizar la situación hasta la llegada de los organismos de socorro externos profesionales.

Deben contar con Equipos de Protección Personal (EPP) adecuados para su función (cascos, guantes, chalecos identificativos), así como herramientas de respuesta: extintores, botiquines, camillas y sistemas de comunicación.

A través de simulacros. Parte de nuestro servicio incluye el acompañamiento en estos ejercicios prácticos donde se simula una emergencia real para medir tiempos de respuesta, coordinación y eficacia, permitiendo realizar mejoras continuas.